Willmering es un pueblo pequeñín en
el que estuvimos de WWOOF (World-Wide Opportunities on Organic Farms es una red de organizaciones nacionales que facilitan el trabajo de voluntariado en granjas ecológicas de todo el mundo). Fueron cinco días en los que Ana y Marcel
estuvieron en una finca ecológica ayudando en varias tareas como
arrancar tomateras del huerto (estábamos a octubre ya con primeros
fríos), dar de comer a los caballos y sacarlos a pastar, así como
limpiar sus excrementos llenando capazos con ellos para trasladarlos
a otro sitio para ser compostados… También ayudamos a los
granjeros a medir perímetros del huerto. Allí hicimos algunos
agradables paseos por el bosque donde aprendimos a distinguir una
picea de un abeto (se ve que el abeto tiene hojas planas mientras que
la picea las tiene cilíndricas y “llenas” nunca te vas a dormir
sin aprender algo nuevo). En la granja también conocimos a una
persona maravillosa, la abuela María (o Oma Maria, como nosotros nos
referíamos a ella) una anciana con un admirable nivel de inglés y a
quien le encantaba hablar con nosotros sobre setas, fases lunares y
gente de la República Checa, país situado a pocos kilómetros de
allí, tema que a Marcel siempre le gusta, pues él es checo por
parte de padre.
Tengo más fotos en las que
sale un pueblo más grande (mercado, castillo rojo…) son de Cham
que es el pueblo grande que hay más cercano a Willmering, y donde
van los granjeros a comprar en su mercado. A ver si las consigo.
Publicar un comentario